Desde la Juventud Comunista (UJCE) en Villaverde seguimos denunciando la actuación del gobierno regional de la Comunidad de Madrid, ante los continuos recortes de servicios a la ciudadanía en general y a los vecinos de Villaverde en particular.
En esta ocasión son 250 personas las que se han quedado sin su curso en el Centro de Educación para Personas Adultas (CEPA) de Villaverde, privándolas de su derecho a una educación integral. Lo más sangrante del asunto es que, como es costumbre por parte de la Comunidad, la suspensión de las clases se hizo una vez empezado el curso, sin previo aviso ni explicación sobre los motivos de la cancelación de este servicio.
Es por ello que ahora, como siempre hemos hecho, queremos mostrar nuestro apoyo a los vecinos afectados por esta decisión totalmente arbitraria e injustificada, que sigue en la línea del gobierno regional de recortar servicios y derechos a los que menos recursos tienen, y de favorecer a los más ricos.
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